Se ha dicho que es un
compromiso del Alcalde con los constructores que financiaron su campaña.
(Ver artículo “Constructores: grandes dueños de la
Van der Hammen” (El
Espectador, abril 2/2016). También se ha afirmado que es una manera de
financiar la gestión del Alcalde, gracias a la plusvalía que generaría el
cambio de uso del suelo y que, adicionalmente, es necesario levantar la reserva
para construir vías y evitar los trancones a la salida norte de la capital.
Entre los argumentos en el pro de la RVdH están los presentados
por la Academia de Ciencias, donde sobresalen los recursos hídricos
subterráneos y la posibilidad de generar un corredor biológico entre los cerros
orientales y el rio Bogotá. Para muchos ciudadanos de a pie, lo prioritario es
la posibilidad de disfrutar de un área verde en medio de la urbanización
galopante de la Sabana de Bogotá.
El artículo “Alcaldía propone 10 vías sobre la
Reserva Van der Hammen” (El
Espectador, septiembre 29/2016) alimenta la controversia diciendo: “El
Distrito, a través del PNUD, contratará estudios para respaldar su petición de
sustraer terrenos de la Reserva Van der Hammen, para construir vías sobre suelo
protegido.” Señala que los estudios buscan que la CAR autorice el paso de 10
vías por la RVdH. La Alcaldía argumenta que el proyecto vial es indispensable
para “desarrollar de forma sostenible” el borde norte de la ciudad,
desahogar su crecimiento y solventar problemas de movilidad. Preocupa a la
ciudadanía que el estudio del PNUD sea el primer paso para dar vida al
desarrollo urbanístico en la RVdH.
Ante esta noticia, y coincidiendo con Brigitte Baptiste,
directora del Instituto Humboldt, quien en la introducción al libro Cambio
Climático, Lecciones de y para ciudades de América Latina (Universidad
Externado de Colombia, 2016) escribió “Todo lo que los centros urbanos puedan
hacer hoy para ser más verdes, los hará más fuertes y competitivo el día de
mañana”, busqué a miembros del PNUD para conocer su posición.
El PNUD propone abrir
un dialogo ciudadano basado en información actualizada sobre la RTvD, sus
recursos naturales y cómo estos se verían afectados por las posibles
intervenciones, y evaluar el impacto ambiental de las vías propuestas, además
de identificar potenciales medidas de compensación ambiental y social en caso
de intervención.
Los terrenos de la RVdH
ofrecen múltiples opciones que incluyen áreas verdes y calidad de vida,
conectividad y expansión del área metropolitana, protección de recursos
naturales, competitividad y, desde luego, urbanización y renta del suelo
urbano.
Bienvenidas las
Naciones Unidas para que lideren un diálogo nacional -con aportes de
experiencias internacionales- para discutir a profundidad con científicos,
ambientalistas, propietarios del suelo, constructores y Alcaldía sobre la RVdH.
Las ciudades tienen que rediseñarse y planificar su crecimiento, considerando
el cambio climático y el calentamiento global. No es un plebiscito sobre el Sí
o el Nó a la RVdH; es un dialogo sobre cómo asegurar un área verde para la
ciudad.
Mucho se ha especulado sobre cuáles sean los verdaderos intereses que mueven a la Alcaldía de Bogotá para pretender levantar la Reserva Van ...